Con gran pesar, el pasado 14 de julio, nos despedimos de nuestra querida Elisa Corcuera, miembro fundador de Así Conserva Chile y quien se dedicó incansablemente a levantar y establecer esta institución, desde su creación en el año 2010.
Desde temprana edad, Elisa se interesó por el cuidado del medio ambiente y durante sus estudios de periodismo profundizó en esta pasión, que la llevó a formar parte del parque privado Ahuenco. Durante su vida académica en Estados Unidos, aprendió sobre el modelo de conservación privada, muy desarrollado en ese país. Posteriormente en Chile, comenzó a trabajar en la formación de Así Conserva Chile, en la gran tarea de lograr un reconocimiento legal adecuado a los tantos parques privados de nuestro país. En esta misión, su enorme carisma y calidad humana fueron fundamentales para lograr unir diversos actores e iniciativas en torno a un objetivo común. En este contexto también participó muy activamente en el impulso a la ya promulgada ley de Derecho Real de Conservación. También mostró gran interés en la educación ambiental, ligado a la iniciativa familiar Parque Katalapi, que funciona como un centro de investigación y educación ambiental. Junto a su madre Ana María Vliehgenhart, publicaron este año dos libros para niños. Elisa además publicó artículos en revistas y capítulos de libros sobre temas ligados a la conservación.
La aparición de un cáncer desde el año 2008 no impidió que Elisa continuara trabajando con gran dedicación en Así Conserva Chile y enseñándonos además a disfrutar la vida con genuina pasión. Desde su fallecimiento, innumerables personas e instituciones de diversas partes del mundo, han manifestado su cariño y condolencias ante la muerte de esta gran mujer, quien sin duda será recordada en la historia de la conservación privada de nuestro país.
